lunes, 11 de febrero de 2013

¿Retorno al Barca 1.0?



El Barcelona se ha proclamado justo campeón de la copa del rey, y lo ha hecho de forma contundente, una vez superado en cuartos el único rival que podía arrebatarle este prestigioso titulo, enmarcado en un formato único, dentro de una fiesta espectacular. Lo ha hecho como aquel Barca que deleitaba adelante y atrás, hasta que fue eliminado por el Panathinaikos prematuramente. Quizás no poder disputar una Final Four en casa pesó demasiado, pero desde entonces el juego del Barcelona cambió por completo.

Xavi Pascual es un gran entrenador, de esos que no dejan ni un sólo detalle sin cubrir. Todo está amarrado y bien atado. Cada rotación, cada sistema, cada movimiento táctico. A un sólo partido, un fino estratega. Maneja un porcentaje alto en la toma de decisiones adecuadas en el transcurso de un encuentro. Ya se vio en la final de la liga ACB de la pasada temporada, y se ha vuelto a observar en estos tres partidos. Una serie de cambios nos recuerdan a un Barca anterior, más redondo, renunciando al juego plano y miserable que venía realizando desde que Obradovic le dio un repaso táctico en aquella eliminatoria de Euroliga, que le privaría de disputar la Final Four frente a su público. Quizás esto le afecto demasiado...¿acaso no es Obradovic el mejor entrenador de la historia en Europa o uno de los mejores?

Habrá quien piense que este sistema deja a algunos jugadores creativos demasiado enconsertados, limitando notablemente sus capacidades. Podemos pensar en Ricky Rubio y en Marcelinho hasta ahora. Y tendrán razón. La delimitación de roles tan específica favorece las cosas en un equipo plagado de figuras; siempre que están sigan las directrices milímetro a milímetro. Esto fue uno de los problemas que tuvo Messina en Madrid. Sin embargo hay ciertos cambios que parecen haberse producido ultimamente en el equipo de Pascual, que parecen querer volver a aquel Barca 1.0 que tanto encandiló a los amantes del baloncesto.



1. Real Madrid. Antes no existía este rival, o era como si no existiera. La vuelta de los de Laso - con su filosofía de baloncesto rápido y de ataque- obliga al Barca a cambiar de forma de jugar, o de entregar su cetro. Contra este Madrid no basta con defender muy bien, hay que anotar con cierta soltura.

2. Renovación del juego interior. Desprenderse de Vazquez, Perovic y Ndong una decisión muy acertada. Era necesaria una rejuvenecimiento de la plantilla en esos puestos. La apuesta de Jawaii un gran acierto. Después de un periodo de aclimatación empieza a demostrar lo que es capaz. Ante Tomic. Las piezas no siempre encajan de igual modo en todos los equipos. En el Barcelona Tomic no es la única pieza interior consistente, como le sucedía en el Madrid. Con Lorbek, Jawaii y en menor medida Wallace no se siente tan presionado por lo que pueda o no pueda hacer. A un jugador con un cáracter tan débil necesita estar muy arropado. Y aquí lo está.

3. Marcelinho vuelve a la vida. Este Marcelinho empieza a recordarnos al que maravilló en el Baskonia. ¿La razón? Tiene el balón el tiempo suficiente como para crear. La situación de Navarro le beneficia enormemente. El genial escolta funciona mejor con Sada - que muchas veces anda más pendiente de cortar por el fondo que de llevar el balón - y puede tener más tiempo el balón en sus manos que cuando está Marcelinho. Ayer coincidieron en pista y Navarro jugo de escolta, no de base encubierto. Sin duda, es lo mejor para el equipo.

4. Brad Oleson. Un jugador muy completo. No tiene la facilidad para anotar de Navarro, pero a cambio es un gran defensor, conocedor se sus puntos fuertes y que encaja como un guante en el sistema de Pascual. Este fichaje es un gran acierto, sin duda, pero viene destinado a cubrir ciertas sombras. El Barca una vez más se ha aprovechado de una normativa ACB a mi entender chapucera y hasta desleal. Ya sucedió con un ahora repudiado Joe Ingels, y ahora con Oleson. ¿ Fichajes? Sí, pero no de la ACB. Convendría un equilibrio de presupuestos entre los equipos, pero esto es harina de otro costal.

5. Xavi Rabaseda y la segunda juventud de McKeal. Por fin el joven jugador va encontrando su sitio. Claro que era difícil que lo hiciera sin minutos. Su rol está muy determinado, pero el podrá aportar en más facetas, sino al tiempo. Lo de McKeal es sencillamente asombroso. Un jugador con un caracter especial, un competidor nato, cuya ambición no disminuye nunca. A medida que Rabaseda progrese no será necesario que juegue tantos minutos, y su rendimiento mejorará. No hay duda que Pete es como el buen vino.

6. Lo mejor está por venir. El Barca conquista esta copa con autoridad, y lo hace con un Navarro muy renqueante, y un desconocido Erazem Lorbek. El esloveno está irreconocible, pero sin duda volverá ser el de antes con el tiempo. Entonces el potencial del Barca estará completo.

7. Error grave en fichar a Abrines y Todorovic. Aunque el asunto de cupos sea un asunto peliagudo, me parece un grave error cortar la progresión de jugadores jóvenes. Si no vas a darles minutos, lo correcto es cederlos donde si los tengan. Ambas partes saldrían ganando.



No hay comentarios:

Publicar un comentario

¿Por qué nos gusta Jayson Tatum?