El encuentro de hoy ha acabado por dejarme frío. A priori se presentaba con un partido con bastante atractivo. La ocasión podría haber resultado propicia para un BBB, ya que el Madrid podría acusar el cansancio del partido de euroliga. Sin embargo, el conjunto bilbaíno ha salido desconcentrado y tras cometer tres pérdidas de balón un tanto absurdas el Madrid ha abierto brecha en el electrónico. Tras endurecer su defensa, coincidiendo con la entrada a pista de Aaron Jackson y Vaseliadis, el BBB ha estrechado la diferencia en el marcador, coincidiendo con la segunda unidad del Madrid, menos incisiva en ataque y más blanda en defensa.
En el segundo cuarto las cosas no han cambiado demasiado, con el Madrid controlando el partido sin alardes, y el BBB haciendo un juego unidimensional encomendándose al tiro de tres, con alguna esporádica aparición de Mavro. Señalar que Mirotic empieza a ser un jugador importante incluso cuando no está especialmente inspirado. Su juego abierto tras la línea de 6,75 es una amenaza constante, y hoy ha demostrado que puede llevar el balón al suelo de forma muy efectiva. Comprende muy bien el juego pese a su juventud. No hay duda que será un gran jugador. Cuando el equipo visitante ha dispuesto varías oportunidades para ponerse por delante las ha desaprovechado, incurriendo en jugadas precipitadas.
El tercer cuarto ha sido un calco del segundo. El Madrid aumentaba su ventaja, y el BBB la recortaba, merced al buen trabajo de Jackson y Vaseliadis. El juego interior del Madrid representaba una muralla infranqueable para los visitantes, y más teniendo en cuenta la nula aportación de Hernadez-Sónseca – cada vez con un rendimiento más flojo -, y de Banic y Hervelle. Fotsis Kasikaris ha colocado una zona durante unos minutos, pero ha tenido que quitarla, porque era un autentico coladero en los postes. El Madrid por su parte, ha tenido fases de un profundo desconcierto. Sergio Rodríguez no ha acertado con el ritmo de juego que más convenía a su equipo, aunque la buena noticia ha sido la aparición en ataque de Tucker, que ha afinado su puntería con respecto a choques anteriores. Defensivamente ha sabido mantener el tono defensivo, provocando en varios saques de banda muchos problemas al BBB para poner la pelota en juego.
En el último cuarto parecía que el Madrid pondría definitivamente tierra de por medio, al conseguir una renta de ocho puntos, pero de nuevo varias imprecisiones y el acierto exterior del equipo visitante comprimiría el marcador aunque no dieron la sensación los jugadores visitantes que podían llevarse el partido en ningún momento. Tanto Messina como Katsikaris parecían exasperados con algunos errores incomprensibles de sus jugadores, pero finalmente la victoria se quedó en casa. El Madrid hizo lo justo para ganar, ante un equipo que volvió adolecer problemas en la dirección de juego – sólo Jackson actúa con cierta solvencia – y un desequilibrio dentro-fuera bastante alarmante.
Ambos deberán mejorar sus prestaciones en la copa.
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